INGLEWOOD, California.- Dr. Dre y compañía llevaron el peso de la cultura del hip hop al escenario del Super Bowl, resistieron la presión de los escépticos y dieron una sólida presentación en el espectáculo de medio tiempo para demostrar que el provocador rap puede funcionar en uno de los más grandes eventos deportivos del mundo.
Todo lo que se necesitó fueron algunas de las figuras más conocidas del hip hop y a un prominente rapero blanco arrodillado.
Dre, Snoop Dogg, Mary J. Blige, Eminem y Kendrick Lamar fueron los artistas principales junto con 50 Cent como invitado especial en el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl el domingo. Su presentación colectiva es una de las mejores desde la de Beyoncé y Bruno Mars en 2016.
Cada uno de los artistas dio algo característico de ellos: Dre, Snoop Dogg y Lamar llevaron su sabor de la Costa Oeste. Blige, conocida como “La reina del Hip Hop Soul”, logró una emotiva interpretación con baile. 50 Cent revivió memorias musicales con “In Da Club”.
Cuando llegó el turno de Eminem, interpretó un par de sus éxitos comenzando con “Forgot About Dre” con Anderson .Paak en la batería. Aparentemente retó a la NFL al arrodillarse durante “One Shot”, aunque la liga dijo que sabía que sucedería.
Eminem permaneció sobre una de sus rodillas por un momento mientras Dre estaba sentado frente a un piano interpretrando “I Ain’t Mad at Cha” del fallecido Tupac.
Dre, quien es un prolífico productor, comenzó la presentación parado tras una consola sobre una casa blanca de escenografía. Presentó a Snoop Dogg, quien llevaba un vistoso conjunto deportivo azul, y cantó algunos clásicos como “The Next Episode” y “California Love”.
Tras esto Snoop Dogg gritó: “¡Costa Oeste hagan una bulla!”, la declaración del rapero mostró su claro intento por dar una probada destacada de la música del sur de California, especialmente por los autos antiguos modificados que estaban frente al escenario.
Como en su video de “In Da Club”, 50 Cent comenzó su participación de cabeza con una camiseta sin mangas blanca.
Blige apareció en la parte alta de uno de los cuartos de la escenografía con un grupo de bailarines que la acompañaron con su clásico “Family Affair” y después interpretó “No More Pain”. Su sección se unió suavemente con la de Lamar quien iba vestido de negro y estuvo acompañado de otros hombres negros vestidos como él.
Después del número de Eminem los seis se unieron mientras Dre rapeaba “Still Dre”. Su número final estaba acompañado por bailarines con ropa kaki.
Los artistas legendarios, especialmente Dre y Snoop Dogg, presentaron versiones sin groserías de sus canciones para el público familiar. Al principio se sentía raro, porque hubo momentos en los que algún improperio fue cambiado por otra palabra.
En el escenario nacional de la NFL eso funcionó para su beneficio. ¿Por qué? Demuestra que el hip hop se puede interpretar en varias versiones y seguir siendo atractivo para los oídos.