CABO SAN LUCAS.- La tormenta tropical Enrique, que pasó el fin de semana como el primer huracán de la temporada del Pacífico oriental, seguía perdiendo fuerza el martes a medida que se acercaba al extremo sur de la península de Baja California, México.
Las autoridades de Baja California Sur cerraron los puertos de Cabo San Lucas y San José del Cabo a las pequeñas embarcaciones, así como los puertos de Los Barriles y de La Paz. Las autoridades municipales de Los Cabos revisaban posibles lugares de refugio en caso de inundación. Los meteorólogos prevén que caigan entre 2 y 5 centímetros (de 1 a 2 pulgadas) de lluvia en el estado, con cantidades aisladas de hasta 10 centímetros (4 pulgadas).
El gobernador de Baja California Sur, Carlos Mendoza Davis, dijo que el estado estaba preparado para la tormenta.
Enrique pasó por el municipio de Cabo Corrientes, en la costa suroeste de México, el domingo por la noche y empezó a debilitarse el lunes mientras se desplazaba por mar abierto.
Los vientos máximos sostenidos de Enrique se redujeron a 65 kilómetros por hora (40 millas por hora) el martes, apenas alcanzando los niveles de una tormenta tropical, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC por sus siglas en inglés).
Según los pronósticos, en los próximos días la tormenta seguirá debilitándose y “se prevé que el vórtice de Enrique pase cerca o sobre partes del sur de la península de Baja California” a primeras horas del miércoles, señaló el NHC.
El martes por la tarde, el centro de la tormenta se ubicaba a unos 165 kilómetros (105 millas) al este-sureste de Cabo San Lucas, en el extremo sur de la península de Baja California. Se movía al noroeste a 15 km/h (9 mph).
Las fuertes lluvias creaban condiciones peligrosas a lo largo de la costa del Pacífico mexicano.
El martes temprano, un equipo de protección civil del estado de Jalisco rescató a un camionero de las inundaciones del arroyo El Organito en el municipio de Cihuatlán, cerca de los límites con Colima.
El conductor esperó en el capó de su tráiler hasta que los rescatistas pudieron llevarle un chaleco salvavidas y una cuerda. Saltó al agua y fue puesto a salvo.