WASHINGTON.- Las esperanzas de que el presidente electo, Joe Biden, reabra las fronteras de Estados Unidos a los viajes no esenciales parecen comenzar a disiparse y las malas noticias asoman en el horizonte.
Este lunes, el todavía presidente Donald Trump anunció que retirará las restricciones a los viajes procedentes de Europa y Brasil que fueron impuestas debido a la pandemia.
Pero Jen Psaki, quien fungirá como secretaria de prensa de la Casa Blanca del gobierno de Biden, tuiteó después del anuncio de Trump que “por consejo de nuestro equipo médico, el gobierno no pretende retirar estas restricciones”.
De hecho, planeamos reforzar las medidas de salud públicas en torno a los viajes internacionales para mitigar más la propagación del Covid-19”, agregó.
Aunque todo parece apuntar a que el gobierno de Joe Biden aplique medidas más duras para combatir el coronavirus, hay esperanza de los residentes fronterizos de México y Canadá, de que por fin podrán ingresar a Estados Unidos para viajes de turismo o de compras.
La frontera de Estados Unidos está cerrada desde marzo para mexicanos con visa de turista y lo mismo ocurre con Canadá. Sin embargo, hay malestar, especialmente en México, porque muchos ciudadanos con doble nacionalidad cruzan a diario hacia uno y otro lado.
Con la derrota electoral de Trump, los residentes de la frontera mexicana esperaban un cambio en la política que fue impuesta de manera directa por el vicepresidente Mike Pence.
Pero la exigencia de una prueba negativa de Covid a los que viajan en avión hacia Estados Unidos, parece el anuncio de un endurecimiento de la política para ingresar al país norteamericano. Así que el 26 de enero será crucial, especialmente para los residentes de la frontera.