CIUDAD DE MÉXICO.- El saldo de afectados por el incendio en una plataforma de Petróleos Mexicanos en el Golfo de México ascendió el lunes a cinco trabajadores muertos. Además, dos personas siguen desaparecidas y uno de los seis heridos se encuentra grave, indicó Octavio Romero, director de Pemex, en una conferencia de prensa.
El funcionario dijo que debido al suceso se tuvo que paralizar la producción en 125 pozos, lo que supone dejar de producir 421.000 barriles al día, aunque se espera que se reanude de forma paulatina en cuestión de días. México produce 1,7 millones de barriles diarios.
El incendio se registró en las instalaciones de comprensión y generación eléctrica de la plataforma E-Ku-A2 del complejo Ku-Maloob-Zaap, ubicado en el estado de Campeche, y fue controlado poco más de una hora después de que se desencadenara por causas que todavía se desconocen.
Romero no quiso especulare sobre las causas del fuego y subrayó que ya se ha abierto una investigación al respecto pero sí adelantó que fue un accidente.
Se están haciendo los análisis correspondientes, las pesquisas para saber qué ocurrió, no podemos señalar nada”, dijo. “Pero fue derivado, no de una falla de equipo, no de una falta de mantenimiento sino de una tarea programada donde hubo lo que todos conocemos como un accidente. ¿A qué se debió? Lo sabremos con el paso de los días”.
Uno de los fallecidos era empleado de Pemex junto con tres de los heridos y otra persona que sufrió una crisis nerviosa. El resto de las víctimas y los desaparecidos son de dos empresas que ofrecen servicios a la petrolera.
La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador ha emprendido una implacable campaña de reducción de costos y según los críticos esto sumado a la abultada deuda de Pemex podría afectar la inversión, la seguridad y el mantenimiento.
Romero lo negó con vehemencia y destacó que este gobierno es el que ha previsto montos precisamente para este tipo de eventos y reparaciones.
El suceso tuvo lugar a menos de dos meses de otro incendio del mismo complejo Ku-Maloob-Zaap, aquella vez en un gasoducto submarino.
El fuego ocurrido a comienzos de julio fue atribuido a tormentas eléctricas y a la presencia de gas en la superficie del mar. Pemex descartó en esa oportunidad que el incidente hubiera generado un derrame de combustible en el mar pero las espectaculares imágenes que se divulgaron en las redes sociales —tres barcos tratando de sofocar las llamas en medio del océano— provocaron que organizaciones como Greenpeace o la activista climática sueca Greta Thunberg expresaran su preocupación por lo ocurrido y por los riesgos que representan las instalaciones petroleras para el medio ambiente.