LIMA.- Perú estalló el domingo en alegría luego que el presidente interino Manuel Merino renunció tras una semana de protestas que dejaron la víspera dos muertos y más de 100 heridos.
Merino, tercer mandatario desde 2016, orquestó desde el Congreso la destitución de su antecesor Martín Vizcarra, un líder popular que inició una cruzada anticorrupción. Su ascenso al poder, empero, lo convirtió en el centro del repudio de millones de jóvenes que lo consideraron un usurpador.
Balbuceante y equivocándose al leer un brevísimo discurso de seis minutos, Merino cerró su mandato de seis días despidiéndose con la mano derecha y diciendo que “el Perú merece seguir adelante”.
Los líderes del Parlamento unicameral anunciaron que elegirán durante la jornada a uno de los 130 legisladores que se convertirá en el líder interino y que debe gobernar hasta julio de 2021.
Vizcarra, destituido el lunes con 105 votos por el Congreso, salió a la parte frontal del edificio donde vive y criticó que el Parlamento empujó a una “crisis política que tiene cinco días paralizado al Perú, con muertos…”.
Exigió al Tribunal Constitucional a reunirse de urgencia el domingo para que tome una decisión y se “pronuncie de una vez ante la crisis (en) que estamos”.
Vizcarra fue destituido al aplicársele una vaga cláusula de la carta magna del siglo XIX que los expertos dicen puede usarse al antojo de quien la invoque. En el siglo XIX significaba “locura”, pero ahora muchos lo relacionan a una mancha de corrupción.
El exmandatario dijo en referencia a Merino que “ha salido un dictadorzuelo de palacio, no se trata de cambiarlo por otro”.
El lunes 105 personas maltrataron nuestra constitución para tomar por asalto el poder ejecutivo…por contubernios se pusieron de acuerdo para captar el poder”, añadió en relación con su destitución.
La noche del sábado la policía reprimió a miles de manifestantes que repudiaban a Merino.
Las protestas contra Merino empezaron el lunes y el sábado se llevaron a cabo en las principales ciudades de los Andes y la Amazonía. En Lima más de 5 mil manifestantes con mascarillas y protectores faciales llevaban carteles que decían “Merino no es mi presidente”, entre otras frases.
Vizcarra ganó enorme popularidad en 2018 por iniciar una cruzada anticorrupción en un país donde los expresidentes de los últimos 35 años están investigados o condenados por casos de corrupción.
Pero ahora Vizcarra tiene prohibido salir de Perú por un periodo de 18 meses y se encuentra bajo indagación de la fiscalía al ser acusado por otros investigados de recibir una coima cuando fungía como gobernador de la región Moquegua. Él negó las acusaciones y anunció que colaborará con las pesquisas.
Las marchas son las primeras tras una atenuación de los contagios de coronavirus. La propagación de Covid-19 ha convertido a Perú en uno de los países con mayor número de decesos per cápita en todo el mundo y ha sumido a la economía nacional en una recesión con una proyección de pérdida en 2020 de 14 puntos del Producto Interno Bruto, según el Fondo Monetario Internacional.