BEIJING.- La principal reserva de pandas de China presentó el miércoles en sociedad a diez cachorros, con motivo del Año Nuevo Lunar.
Uno parecía tímido, al cubrirse la cara con las patas al ver a la multitud, mientras que otro se salió del programa y se alejó de su cuidador antes de ser atrapado.
Los pandas tenían entre 4 y 6 meses y todos eran el resultado de apareamientos naturales, según el Centro Chino de Investigación y Conservación del Panda Gigante, en la provincia suroccidental de Sichuan.
Los cachorros blanquinegros fueron presentados en una zona de juegos del centro adornada con motivos tradicionales del Año Nuevo Lunar, como faroles, nudos chinos tradicionales, autos hechos con cartón y banderas.
“Los pandas recién nacidos de 2020 (…) les desean un feliz Año Nuevo y muy buena suerte en el Año del Buey”, exclamaron los cuidadores con los oseznos en brazos, mientras algunos de los cachorros intentaban escabullirse.
Había canastas de bambú preparadas para los pandas con el carácter chino “fu”, que representa la buena suerte y bendiciones, escrito por fuera.
Esto imitaba la tradición china de que los adultos regalen sobres rojos con dinero a los niños durante el Año Nuevo Lunar, para transmitir sus buenos deseos y bendiciones.
En lugar de dinero, los pandas recibieron golosinas. Algunos tenían curiosidad por las canastas, mientras que otros se distrajeron con los juguetes y decoraciones.
En diciembre había 44 cachorros de panda en todo el mundo, más de la mitad nacidos en China. China se ha enorgullecido de sus esfuerzos por preservar una especie que estuvo amenazada durante muchos años. Los pandas son también un símbolo de China y una pieza de su diplomacia cultural.