MIAMI.- El cantante Alejandro Fernández anunció este martes con emoción que regresa a los escenarios de Estados Unidos y lo hará junto a su hijo Alex, luego de suspender su gira en 2020 por la pandemia.
Estoy muy emocionado de retomar los conciertos con él», aseguró Alejandro en un comunicado, especificando que ambos harán mancuerna en la etapa estadounidense de su tour «Hecho en México».
Regresar después de tanto tiempo apoyándolo (a su hijo) es muy especial para mí», subrayó, además de adelantar que también se ha involucrado en lo que será el próximo disco de Alex.
Con casi 30 años de carrera, el artista ha viajado por el mundo con su pop mexicano y mariachi. Sin embargo, admitió que es posible que sus fans noten algunos cambios en sus próximos conciertos.
He afrontado la muerte durante la pandemia. Ha sido muy difícil. Se me ha ido mucha gente querida», reveló sin especificar nombres. Su padre tiene 81 años y ha estado plagado de enfermedades en años recientes.
No solo ha sido la Covid-19 lo que le obligó a reflexionar sobre lo efímero de la vida. Este jueves recibirá el premio «Ícono» en los Latin American Music Awards.
Después de decenas de galardones, cuesta pensar que siguen siendo especiales, pero El Potrillo asegura que los «atesora» y este es aún más especial porque le «hizo mirar hacia atrás».
No me había dado cuenta de que estoy por cumplir 30 años en esto, aunque me siento como el primer día. Esa cosquillita no se me ha ido y ya estoy contando los días (para el reinicio de la gira)», puntualizó.
El tour estadounidense arrancará en Reno, Nevada, el 10 de septiembre. Seguirá por Sacramento y llegará a Las Vegas para dar «El Grito de la Independencia», como ha sido su costumbre desde hace años.
Terminará en Phoenix el 24 de octubre, después de pasar por ciudades como Chicago, Boston, Atlanta, Houston, Nueva York, Miami y San Antonio, entre otras.
Parte de la taquilla de las 19 fechas anunciadas será destinada a la organización pro inmigrante Families Belong Together (Las Familias Merecen Estar Juntas). «Es una misión que es muy importante para mí y para toda mi familia», explicó.