ST. PETERSBURG, Florida.- Elsa, que perdió fuerza mientras golpeaba naciones del Caribe, recuperó su poder, se transformó en huracán de nuevo y lanzó a Florida poderosas lluvias y complicó la búsqueda de sobrevivientes de un edificio residencial que se desplomó en Miami.
El martes por la tarde, Elsa, recuperó su fuerza de huracán.
El Servicio Nacional de Meteorología informó que el huracán Elsa tenía vientos máximos de 121 kilómetros por hora (75 millas por hora) mientras se dirigía hacia la costa norte de Florida en el Golfo de México. Se tiene previsto que la tormenta de categoría 1 toque tierra firme el miércoles entre las 8:00 y las 9:00 de la mañana, en algún sitio entre la zona de la bahía de Tampa y la región de Big Bend.
Además de vientos fuertes y lluvias intensas, el Centro Nacional de Huracanes, o NHC por sus siglas en inglés, advirtió que hay peligro de marejadas ciclónicas, inundaciones y tornados aislados. Se emitió una alerta de huracán para un largo trecho de la costa de Florida, desde cayo Egmont, en la bahía de Tampa, hasta el río Steinhatchee, en la zona Big Bend. Se prevé que Elsa toque tierra firme en algún punto intermedio.
La zona de Tampa es sumamente vulnerable a las marejadas ciclónicas porque las aguas de la costa y la bahía de Tampa son muy poco profundas, de acuerdo con los expertos. El gobernador Ron DeSantis dijo que la región sería impactada fuertemente por la tormenta durante la noche.
Ahora “no es momento de pasear” porque “tenemos condiciones peligrosas allá afuera”, dijo DeSantis en una conferencia de prensa el martes.
Pero en las poblaciones costeras de las islas a lo largo de la costa en el Golfo básicamente todo seguía como de costumbre, y muy poca gente tapiaba sus ventanas o tenía contraventanas para protegerlas el martes por la mañana.
Se estaban repartiendo sacos de arena de manera gratuita en varios lugares, y se abrió un número limitado de refugios en al menos cuatro condados del área de la bahía de Tampa, aunque no se han ordenado evacuaciones.
Nancy Brindley, de 85 años, que vive en una casa junto al mar construida en 1923, dijo que ya ha experimentado 34 ciclones tropicales y que nunca ha tenido contraventanas en su vivienda. Su principal preocupación es qué pasará con la arena de la playa adyacente y con las dunas que protegen su casa y las de otras personas. Dijo que ella se quedará en casa durante el paso de la tormenta.
La principal preocupación aquí es que, si no avanza y decide detenerse, habrá una erosión enorme”, afirmó.
En la región de la bahía de Tampa, hogar de unas 3,5 millones de personas, los eventos fueron suspendidos y las oficinas de gobierno y escuelas cerraron el martes temprano previo a la llegada de la tormenta. El Aeropuerto Internacional de Tampa suspendió sus actividades a las 5 de la tarde.
Se pronostica que las bandas de lluvia de Elsa lleguen a Surfside, en la costa de Florida en el océano Atlántico, empapando los escombros de la torre Champlain Towers South, que colapsó el 24 de junio, matando a por lo menos 36 personas. Las cuadrillas de rescate han trabajado bajo la lluvia en busca de más de 100 personas cuyo paradero aún se desconoce, aunque los relámpagos provocaron que los rescatistas pausaran sus labores durante dos horas el martes por la mañana, dijeron las autoridades.
Elsa se ubicaba a 160 kilómetros (100 millas) al sur de Tampa. Se movía hacia el norte a 23 km/h (14 mph), de acuerdo con el NHC.
DeSantis expandió un estado de emergencia para cubrir 33 condados.
Después de Florida, los meteorólogos pronostican que Elsa impactará las cosas de Georgia y Carolina del Sur, zonas que están bajo una alerta de tormenta tropical.