SALT LAKE.- Un día después de la llegada de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, a Taiwán, China comenzó a tomar represalias en contra de la isla que considera parte de su territorio.
El Ministerio de Defensa taiwanés dijo este miércoles que 27 aviones militares del Ejército Popular de Liberación de China ingresaron este 3 de agosto en su zona de defensa aérea.
El día anterior otras dos docenas de cazas habían hecho recorridos similares, sin entrar al espacio aéreo de Taiwán, para luego regresar. Beijing suele hacer este tipo de maniobras como signo de advertencia contra la isla autónoma.
Pelosi dejó la isla este miércoles despúes de reunirse con las autoridades taiwanesas y continuó con su gira en Asia.
En tanto, China bloqueó la importación de cítricos y pescado de Taiwán en represalia por la visita de Nancy Pelosi, pero evitó trastornar una de las relaciones de tecnología y manufactura más importantes del mundo.
El continente y la isla, divididos desde 1949 a raíz de una guerra civil, no tienen relaciones oficiales, pero sí mantienen lazos comerciales multimillonarios, sobre todo en la provisión de chips para las fábricas chinas armadoras de los teléfonos celulares y otros artefactos electrónicos que utiliza el mundo.
Construyeron ese negocio durante las décadas en que Beijing amenazaba imponer el régimen del Partido Comunista mediante un ataque a la isla autónoma.
El comercio bilateral aumentó 26 por ciento el año pasado a 328 mil 300 millones de dólares. Taiwán, que fabrica la mitad de los chips del mundo y tiene tecnologías que el continente no puede igualar, dijo que las ventas a las fábricas chinas aumentaron 24.4 por ciento a 104 mil 300 millones de dólares.
RESPONDE TAIWÁN CON SUS PROPIOS AVIONES
Taiwán puso en el aire el miércoles aviones para rechazar a los 27 cazas chinos en su zona de defensa aérea, según el Ministerio de Defensa de la isla, que añadió que 22 de ellos cruzaron la línea divisoria que separa la isla de China en medio de una creciente tensión.
Taiwán dijo que había enviado aviones y desplegado sistemas de misiles para «vigilar» las actividades chinas en su zona de identificación de defensa aérea, o ADIZ, en el más reciente repunte de hostilidad en el estrecho de Taiwán.
Taiwán se ha quejado en los últimos años de las repetidas misiones de la fuerza aérea china cerca de la isla, gobernada democráticamente, a menudo en la parte suroeste de la ADIZ.
La última misión china incluyó 16 cazas Su-30 chinos y otros 11 aviones, según el Ministerio de Defensa de Taiwán. Una fuente familiarizada con los planes de seguridad de Taiwán dijo a Reuters que los 22 aviones que cruzaron la línea divisoria no se adentraron demasiado en la zona de amortiguación no oficial del lado chino. Ninguno de los dos bandos suelen cruzar la línea divisoria con sus naves de combate.