CIUDAD DE MÉXICO.- El pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general el dictamen de la reforma eléctrica propuesta por el Ejecutivo Federal como iniciativa preferente.
Con 304 votos a favor, 179 en contra y 4 abstenciones se avaló en lo general la reforma, pero se han presentado 412 reservas, por lo que seguirá la discusión en lo particular.
La reforma modifica el régimen de despacho de energía a la Comisión Federal de Electricidad, con lo que se privilegiará la energía producida por las hidroeléctricas y de otras plantas productoras de la propia empresa, y al final las energías limpias.
La reforma fomentará un mayor uso de combustóleo y carbón en la generación de electricidad que venda a la CFE.
Además, se dispone la cancelación de los contratos de generación firmados con la iniciativa privada desde hace años para generar energías renovables.
Los permisos de autoabastecimiento, con sus modificaciones respectivas, otorgados o tramitados al amparo de la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica, que continúen surtiendo sus efectos jurídicos, obtenidos en fraude a la ley, deberán ser revocados por la Comisión Reguladora de Energía mediante el procedimiento administrativo correspondiente.
En su caso, los permisionarios podrán tramitar un permiso de generación, conforme a lo previsto en la Ley de la Industria Eléctrica», cita la reforma.
También precisa que los Contratos de Compromiso de Capacidad de Generación de Energía Eléctrica y Compraventa de Energía Eléctrica suscritos con productores independientes de energía al amparo de la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica, deberán ser revisados a fin de garantizar su legalidad y el cumplimiento del requisito de rentabilidad para el Gobierno Federal, de acuerdo a la Constitución.
En su caso, dichos contratos deberán ser renegociados o terminados en forma anticipada», advierte el dictamen sobre la cancelación de contratos vigentes.
Los diputados también eliminaron artículo cuarto en vigor de la Ley de la Industria Eléctrica, en el cual se señala que la generación y comercialización de energía eléctrica son servicios que se prestan en un régimen de libre competencia.
Además, con la reforma se permitirá el acceso abierto a la red nacional de transmisión y a las redes generales de distribución en términos no discriminatorios, «solo cuando sea técnicamente factible», lo que favorece a la CFE.
También se crea la figura de contrato de cobertura eléctrica con compromiso de entrega física.