WILMINGTON, Delaware.- Los presidentes Joe Biden y Vladimir Putin se preparan para discutir la intensificación de tropas rusas cerca de Ucrania durante su segunda videollamada en semanas recientes, en un momento de pocos avances para poner fin a la crisis latente.
Previo a la llamada del jueves, la Casa Blanca indicó que Biden dejaría en claro a Putin que sigue abierto un camino diplomático incluso cuando los rusos han movilizado un estimado de 100 mil soldados hacia Ucrania y Putin ha intensificado sus demandas de garantías de seguridad para impedir que la OTAN acepte la incorporación de Ucrania.
Tales exigencias serán discutidas por funcionarios de alto rango de Estados Unidos y Rusia durante el diálogo programado para el 10 de enero en Ginebra.
Pero Biden reiterará a Putin que, para que haya “progreso real” en las conversaciones, deben realizarse en “un contexto de disminución en lugar de intensificación”, según un alto funcionario del gobierno estadounidense que informó a la prensa antes de la llamada. El funcionario habló bajo condición de anonimato.
La llamada se organizó por iniciativa de Putin, informó el jueves el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov.
El objetivo de la conversación es claro: seguir discutiendo los temas que estaban en la agenda durante la reciente conversación por videollamada”, dijo Peskov a la prensa, y agregó que también se discutirán temas relacionados con las conversaciones de enero.
Ambos mandatarios tuvieron una videollamada el 7 de diciembre en que su conversación se enfocó en gran parte en los movimientos de las tropas rusas que han inquietado a Ucrania y otros aliados europeos, así como en las demandas de Moscú para garantías de seguridad que excluyan a Ucrania de la OTAN.
Peskov señaló que desde la llamada, Moscú ha presentado sus propuestas de seguridad a funcionarios estadounidenses y europeos, y ahora “desde nuestro punto de vista, desde el punto de vista de Putin, ha surgido la necesidad de otra conversación telefónica como prefacio a las próximas conversaciones”.
El funcionario añadió que no estaba previsto que Biden y Putin, quienes se reunieron en junio en Ginebra para discutir una serie de tensiones en la relación entre Estados Unidos y Rusia, participaran en las próximas conversaciones de enero.
En la videollamada del 7 de diciembre, la Casa Blanca señaló que Biden advirtió a Moscú que una invasión a Ucrania generaría sanciones y un daño enorme a la economía rusa. Los funcionarios rusos han descartado las amenazas de sanciones.