CIUDAD DE MÉXICO.- El huracán Pamela, que amenaza la zona de Mazatlán, en Sinaloa, podría alcanzar la frontera de Texas-Coahuila y, quizá algunas lluvias se dejen sentir en el área de los dos Laredos para jueves o viernes.
Pamela se fortalecía el martes conforme avanzaba frente a las costas de México en el Pacífico y se prevé que gane aún más potencia, para convertirse en huracán categoría 3, antes de tocar tierra cerca del puerto de Mazatlán el miércoles.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos indicó que la mañana del martes, el vórtice de Pamela se ubicaba unos 405 kilómetros (250 millas) al suroeste de Mazatlán y se movía en dirección norte-noroeste a unos 20 km/h (13 mph). La tormenta registraba vientos máximos sostenidos de unos 130 km/h (80 mph).
Se pronostica que Pamela vire hacia el norte y noreste, pasando cerca del extremo sur de la península de Baja California con fuerza de huracán el martes por la noche o el miércoles en la madrugada. Se calcula que el meteoro tocará tierra cerca de Mazatlán, posiblemente como huracán de categoría 3.
Posteriormente, se prevé que se debilite mientras atraviesa el norte de México y se aproxime el jueves a la frontera con Texas como depresión tropical.
Se prevé que los efectos de Pamela, ya como depresión, se dejen sentir en el área de Ciudad Acuña y Piedras Negras, en Coahuila y en Del Río y Eagle Pass, Texas, pero el “embudo” de influenza alcanza a los dos Laredos.
En el área de los dos Laredos no se esperan grandes tormentas, pero si son posibles las lluvias entre jueves y viernes.
El centro de huracanes advierte la posibilidad de marejadas ciclónicas, inundaciones súbitas y vientos peligrosos cerca del área del impacto, en la zona costera de Sinaloa.