BOZALAN, Turquía.- Los bomberos batallaron el lunes por sexto día consecutivo para sofocar enormes incendios forestales cerca de los populares centros playeros de Turquía.
Azuzadas por los fuertes vientos y las altas temperaturas, las llamaradas iniciadas el miércoles han dejado ocho muertos a su paso.
Miles de residentes y turistas han abandonado las zonas costeras, incluso en barcos, carros o camiones. Muchos habitantes de la zona han perdido sus viviendas y animales y están sufriendo dolencias respiratorias debido al denso humo.
En total unas 10 mil personas han sido evacuadas solamente en la provincia Mugla, informó el lunes el ministro del interior Suleyman Soylu.
El ministro de bosques y agricultura Bekir Pakdemirli indicó que los bomberos están batallando siete incendios en las provincias costeras de Antalya y Mugla, sumamente populares entre los turistas.
También ardían llamas en Isparta, a 380 kilómetros (236 millas) al noreste, y en Denizli en el sudoeste del país.
Los bomberos, sin embargo, sí lograron contener otro incendio, ubicado en Tunceli, en el sudeste de Turquía, indicó el ministro.
En total, 129 incendios ocurridos en más de 30 provincias han sido sofocados, afirmó.
Estamos pasando por días en los que la temperatura supera los 40 grados centígrados (104 Fahrenheit), donde los vientos son fuertes y la humedad su sumamente baja”, expresó Pakdemirli. “Estamos lidiando con estas condiciones tan difíciles”.
Una columna de camiones de bomberos, sonando sus sirenas, conducían a toda prisa a Bozalan, donde se veía a los ganadores tratando de sacar su ganado de la zona.
El domingo, los habitantes de la aldea de Cokertme tuvieron que huir despavoridas ante el avance de las llamas, algunos por tierra y otros por mar. Ahmet Aras, alcalde del cercano poblado de Bodrum, calificó la escena como “un infierno”.