BUCARAMANGA, Colombia.- El helicóptero en el que viajaba el presidente de Colombia, Iván Duque, fue atacado a tiros el viernes en el noreste del país. Se trata del primer atentado de este tipo contra un jefe de Estado en la historia reciente.
El mandatario aseguró que tanto él como los miembros del gobierno que lo acompañaban se encuentran a salvo. “Quiero informarle al país que luego de cumplir un compromiso en Sardinata, en el Catatumbo colombiano y aproximándonos a la ciudad de Cúcuta, el helicóptero presidencial fue víctima de un atentado… Tanto el dispositivo aéreo como la capacidad del aeronave evitaron que ocurriera algo letal”, dijo Duque en una declaración oficial desde Cúcuta, sin especificar la hora del ataque ni sus posibles autores.
El helicóptero de la Fuerza Aérea Colombiana, FAC-0007, recibió varios impactos de bala, según se observa en un video difundido por la Presidencia. La aeronave se desplazaba por la región del Catatumbo, fronteriza con Venezuela y donde operan varios grupos armados.
Junto con el mandatario también se transportaban el ministro de Defensa, Diego Molano; el ministro del Interior, Daniel Palacios, y el gobernador de Norte de Santander, Silvano Serrano, quienes asistían a un evento llamado “Paz con Legalidad, capítulo Catatumbo Sostenible”.
Se trata del primer atentado contra Duque, aunque en el pasado la inteligencia militar ha detectado planes infructuosos. En 2018, cuando el presidente iniciaba su mandato, el gobierno informó que investigaba “posibles atentados” en contra del mandatario a llevarse a cabo en un evento público.
El presidente calificó el atentado contra su vida como un acto “cobarde” y aseguró que esto no lo hará desistir de luchar contra el narcotráfico, el terrorismo y la “criminalidad organizada que operan en el país”.
El mensaje es que Colombia sigue siempre fuerte enfrentando la criminalidad y nuestras instituciones están por encima de cualquier amenaza”, añadió.
Cúcuta, la ciudad a la que se transportaba, se mantenía en alerta de seguridad debido a que el 14 de junio se registró un atentado con un coche bomba en una base militar que causó 36 heridos, entre militares y civiles.
Las autoridades todavía no han confirmado los autores del hecho, sin embargo, han señalado la presunta responsabilidad de las disidencias de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN), guerrilla que negó estar detrás del crimen.