CIUDAD DE MÉXICO.- La polución de pequeñas partículas suspendidas se disparó el domingo en Ciudad de México a casi seis veces el límite aceptable, un nivel que no se había visto en años en la capital mexicana.
Los niveles de partículas pequeñas PM10 alcanzaron los 581 puntos en el barrio de Iztapalapa, en una escala donde 100 se considera el nivel aceptable más alto.
No se declaró ninguna alerta formal por contaminación, aunque los niveles bastaron para dar una calificación de “extremadamente mala” a la calidad del aire en la red de monitoreo de la ciudad.
Las alertas, que pueden prohibir que circulen algunos vehículos, suelen declararse cuando la polución es de entre 1.5 y 2 veces el límite aceptable.
Las partículas PM10 suelen ser de polvo o tierra suspendida en el aire, y la red de monitoreo advirtió que probablemente los fuertes vientos aumentarían su concentración.
Los altos niveles de ozono y las partículas especialmente pequeñas, que entran en la categoría PM2,5, suelen deberse a las emisiones de vehículos y suelen dar más problemas en Ciudad de México. Pero no parecían jugar un papel tan relevante en el pico de contaminación del domingo. La primavera es la temporada seca en el centro de México, y un momento en el que los agricultores a las afueras de Ciudad de México suelen quemar pastos para preparar los campos para sembrar.