WASHINGTON DC.- El Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, creó este lunes un Consejo de Políticas de Género que buscará elevar la lucha por la igualdad en todos los niveles de su Gobierno, además de pedir a su equipo que actúe para combatir los abusos sexuales en los campus universitarios del país.
El nuevo consejo de la Casa Blanca es la entidad gubernamental más poderosa creada hasta ahora en el país para impulsar la igualdad y tiene entre sus objetivos crear un plan nacional para acabar con la violencia de género, que afecta en algún punto de sus vidas a una de cada tres estadounidenses.
Es una prioridad para nuestra Administración promover la igualdad y equidad de género, a nivel doméstico y a nivel internacional», dijo en español una de las dos presidentas del nuevo consejo, Julissa Reynoso.
El nuevo consejo de la Casa Blanca será el primero de la historia del país que tendrá al menos a una persona dedicada a tiempo completo a promover políticas de igualdad, y el primero cuyas integrantes asesorarán directamente al Presidente.
En un comunicado con motivo del Día Internacional de la Mujer, Biden aseguró que el consejo se dedicará a «asegurar que todas las políticas nacionales e internacionales» de su Gobierno «se apoyan en una base de dignidad e igualdad para las mujeres».
Aunque tanto Bill Clinton (1993-2001) como Barack Obama (2009-2017) contaron con sendas oficinas dedicadas a temas de género -que desaparecieron bajo los mandatos de George W. Bush y Donald Trump-, ninguna de ellas tuvo demasiada relevancia.
El nuevo consejo de la Casa Blanca será el primero de la historia del país que tendrá al menos a una persona -Klein- dedicada a tiempo completo a promover políticas de igualdad, y el primero cuyas integrantes asesorarán directamente al presidente, algo que no ocurría con Clinton u Obama.
Reynoso deberá compaginar sus tareas en el consejo con su labor como jefa de gabinete de la primera dama, que le ha llevado a implicarse también en política migratoria y en particular en el grupo de trabajo para reunir a las familias indocumentadas separadas en la frontera bajo el mandato de Trump.
En la nueva oficina trabajará además una persona -aún por contratar- que asesorará a Biden sobre temas de violencia de género, y otra asesora centrada en políticas de igualdad para mujeres negras, latinas, de origen asiático o indígenas.
El consejo tendrá retos urgentes sobre la mesa, como la crisis generada por la salida del mercado laboral de más de 2.5 millones de mujeres estadounidenses desde que empezó la pandemia, pero también centrará muchas energías en «cambios estructurales de largo plazo», explicó Reynoso.
Entre ellos, Klein citó el impulso para que en Estados Unidos haya una «baja de maternidad, familiar o médica pagada», algo que ahora no existe por ley, además de «conseguir que el cuidado infantil sea más asequible» y combatir la discriminación basada en la identidad de género o la orientación sexual.