WASHINGTON.- El presidente electo Joe Biden respaldó el miércoles un plan bipartidista de ayuda por el Covid-19, al tiempo que sus principales aliados en el Capitolio redujeron en casi la mitad sus exigencias de un paquete de más de 2 billones de dólares con la esperanza de romper un estancamiento de meses y aprobar la esperada ayuda antes de que el Congreso cierre sus sesiones.
Biden dijo que el paquete “no sería la respuesta, pero sería la ayuda inmediata para muchas cosas”. Indicó que quiere que el Congreso apruebe ahora un proyecto de ley de apoyo, y que el año próximo se otorgue más ayuda.
El presidente electo hizo sus declaraciones luego de un anuncio de la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, y el senador Chuck Schumer, líder de la minoría demócrata en el Senado, en respaldo a una propuesta de casi un billón de dólares como “base” para las discusiones. El anuncio pareció dirigido al líder de la mayoría republicana en la cámara alta, Mitch McConnell, quien hasta ahora se ha negado a abandonar el paquete republicano de 550 mil millones de dólares que ha fracasado ya dos veces este otoño.
Los demócratas adoptaron una propuesta de 908 mil millones de dólares presentada por el senador demócrata Joe Manchin y la senadora republicana Susan Collins, entre otros. El plan establecería un pago semanal de 300 dólares por desempleo, enviaría 160 mil millones en ayuda a los gobiernos estatales y locales, apoyaría a escuelas y universidades, reactivaría un popular subsidio de protección salarial para negocios pequeños, y rescataría sistemas de transporte y aerolíneas.
Con el espíritu de llegar a un acuerdo pensamos que la propuesta bipartidista presentada ayer por los senadores debe ser usada como base para negociaciones bipartidistas inmediatas de ambas cámaras”, dijeron Pelosi y Schumer. Indicaron también que intentarán trabajar a partir de ese enfoque, que ha conseguido el respaldo de una coalición bipartidista en la cámara baja.
La declaración fue una concesión significativa de Pelosi y Schumer, que antes de las elecciones se mantuvieron firmes en negociaciones fallidas con el gobierno del presidente Donald Trump sobre un plan más costoso. Los demócratas querían prestaciones más generosas por desempleo y mucho más dinero para los gobiernos estatales y locales. Su adopción de la propuesta de 908 mil millones de dólares es una concesión respecto a una oferta secreta por 1,3 billones que ambos le presentaron a McConnell el lunes.
El nuevo plan incluye una protección contra responsabilidad para empresas y otras organizaciones que han reabierto sus puertas durante la pandemia de coronavirus en caso de que se contagien sus trabajadores o sus clientes. Es la primera vez que Pelosi y Schumer se muestran dispuestos a considerar la idea.
McConnell había rechazado la propuesta bipartidista el martes, optando por buscar el respaldo republicano a su plan de 550 mil millones de dólares. Sin embargo, en el verano el propio McConnell apoyó un plan de 1 billón de dólares, pero se retractó tras encontrar resistencia de los conservadores. Ha reconocido, no obstante, que otra inyección de fondos a los gobiernos estatales y locales, una exigencia clave de Pelosi, probablemente será aprobada a la larga.
McConnell no respondió cuando se le pidió que comentase sobre la declaración de los demócratas. Su principal adjunto, el senador John Thune, dijo que los líderes republicanos podrían acordar fusionar la propuesta bipartidista con la de McConnell.
Creo que aún hay tiempo, aunque no mucho, para armar un proyecto de ley”, señaló Thune. Cualquier paquete de ayuda sería adjunto a una ley de gastos de 1,4 billones de dólares requerida para evitar un cierre del gobierno federal el próximo fin de semana. Las negociaciones sobre esa medida están en curso, pero si hay tropiezos, se necesitaría una ley temporal como puente para el año próximo.