MIAMI.- Siete disturbios meteorológicos prevalecían en el Golfo de México y el Atlántico Central. Uno de ellos aún no se desarrolla como ciclón tropical, pero sí representa una amenaza para las costas de Tamaulipas
La tarde de ayer, una desorganizada concentración de nubes se ubicaba casi frente a la costa de Matamoros, en la parte de Central del Golfo de México.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) considera que es posible que en unos cinco días surja una depresión tropical que podría golpear en algún punto entre Matamoros y el puerto de Veracruz, aunque las probabilidades ahora parecen muy bajas.
El NHC recomendó seguir de cerca el desarrollo de este sistema.
Mientras, los habitantes de las Bermudas recibieron avisos el domingo de que deben prepararse para la llegada del huracán Paulette, mientras que la tormenta tropical Sally amenazaba con volverse huracán al acercarse a la costa de Estados Unidos en el Golfo de México.
Paulette se convirtió en huracán el sábado por la noche y se prevé que provoque marejadas ciclónicas, inundaciones costeras y ventarrones en las Bermudas en los próximos días, según un aviso del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés).
El gobierno del archipiélago anunció que el Aeropuerto Internacional L.F. Wade cerraría el domingo por la tarde, y los edificios gubernamentales suspenderían sus actividades el lunes y martes. También abrió varios albergues para los evacuados.
Paulette tenía vientos máximos sostenidos de 130 kilómetros por hora (80 millas por hora) en su desplazamiento por una trayectoria curva hacia las Bermudas, señalaron los meteorólogos. Lo que más se teme es que genere fuertes vientos, marejada ciclónica y hasta 15 centímetros (6 pulgadas) de lluvia, así como oleaje y corrientes peligrosas.
La tormenta se ubicaba el domingo a 385 kilómetros (240 millas) al sureste del archipiélago y se movía en dirección noroeste a 23 km/h (14 mph). Es la más fuerte en términos de vientos de seis perturbaciones que el NHC está monitoreando en el Océano Atlántico y el Golfo de México.
En tanto, Nueva Orleans y las zonas aledañas se encuentran dentro de la trayectoria de Sally, que se prevé se convierta en huracán el lunes y toque tierra el martes por la mañana, afectando una región que va desde Morgan City, Luisiana, hasta Ocean Springs, Mississippi. Se pronostican condiciones de tormenta tropical allí para el lunes.
El gobernador de Luisiana, John Bel Edwards, declaró el sábado el estado de emergencia, y las autoridades de Nueva Orleans emitieron una orden de evacuación obligatoria para áreas que no estén protegidas por diques.
Sally tenía vientos máximos sostenidos de 95 km/h (60 mph) con ráfagas más fuertes, señalaron los meteorólogos.
Se prevé que la marejada ciclónica de Sally alcanzará niveles peligrosos, debido en parte al nivel de la marea. Se prevén hasta 3,4 metros (11 pies) de agua desde la desembocadura del río Mississippi hasta Ocean Springs, Mississippi, incluido el lago Borgne.
Sally, una tormenta de movimiento lento, podría arrojar hasta 51 centímetros (20 pulgadas) de lluvia para mediados de la semana, dijeron los meteorólogos. El sistema, que se movía hacia el oeste-noroeste a 20 km/h (13 mph), se ubicaba a 220 kilómetros (135 millas) al oeste de St. Petersburg, Florida, y a 450 kilómetros (280 millas) al este-sureste de la desembocadura del río Mississippi. El NHC señaló en su aviso de las 11 a.m. que se registraron fuertes lluvias en la costa suroeste de Florida.
Mientras tanto, estaba previsto que René, que llegó a ser tormenta tropical, se transforme en remanente el lunes.
Se pronostica que la depresión tropical 20 se fortalezca esta semana y se convierta en tormenta tropical el martes, agregaron los meteorólogos.
Un sistema de baja presión cerca de las islas de Cabo Verde tenía una alta probabilidad de formación y el NHC también reportó una depresión tropical en el Atlántico central que no parecía representar amenaza para tierra firme.