SANTIAGO.- Chile se quedó a oscuras. Un apagón generalizado que afectó ocho de cada 10 hogares derivó en un toque de queda ordenado por el Gabriel Boric, que fue levantado a las 6:00 de la mañana de este miércoles.

El apagón generalizado que se mantuvo por siete horas y la incertidumbre de la población fue creciendo con el transcurrir del tiempo, pues no se sabía a qué hora se iba a reponer el servicio.

El corte de luz afectó desde Arica y Parinacota, en el extremo norte del país sudamericano hasta la región sureña de Los Lagos. La grave situación, que según el Coordinador Eléctrico Nacional (CEN) fue por una desconexión del sistema de transmisión de 500 kV en el Norte Chico, provocó un caos vial, obligó a la suspensión de las clases en las escuelas y también a la postergación de la tercera jornada del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar. Un día después, las autoridades han informado que la luz ha regresado al 94% de los hogares, aunque todavía persisten más clientes sin luz, en especial en las regiones de Tarapacá y Atacama.

En una de las vocerías que durante el martes entregó el Coordinador Eléctrico Nacional (CEN), un organismo autónomo, se informó que la interrupción del suministro eléctrico se produjo por una desconexión del sistema de transmisión de 500 kV en norte del país, entre Vallenar y Coquimbo. Tras el corte, en el que está el Grupo ISA y su filial ISA InterChile, se activó el Plan de Recuperación de Servicio para reponer los consumos, pero pasadas las 22:00 y tras cuatro intentos, no habían logrado la reconexión. El presidente del consejo directivo del CEN, Juan Carlos Olmedo, afirmó que la desconexión se debió a “una operación no deseada en el sistema de control y protección de la línea”.

Tras el toque de queda, que rigió entre las 10:00 de la noche del martes y las 6:00 de la mañana del miércoles, se registraron 207 detenidos. La ministra del Interior, Carolina Tohá, ha informado en declaraciones a los medios de comunicación que fallecieron tres personas electrodependientes, pero aclaró que se debe investigar si los decesos están relacionados con los cortes de luz. “Su fallecimiento no necesariamente está vinculado al corte; es algo que se tiene que establecer. Preliminarmente, la información indicaría que es altamente probable que no estén vinculadas al corte”, afirmó desde La Moneda. La Fiscalía chilena abrió una indagatoria por los fallecimientos, mientras que el Ministerio de Salud realizará una aditoría clínica.

El corte de luz ocurrió a las 15:16 horas e implicó que más de ocho millones de hogares quedaran sin electricidad, y la mitad de ellos comenzó a recuperar el servicio cerca de las 10:00 de la noche del martes. La situación generó un caos sin apenas precedentes, pues los chilenos de las regiones afectadas debieron salir de sus trabajos anticipadamente y miles de ellos tuvieron que caminar hacia sus hogares, pues los buses de la locomoción colectiva no daban abasto luego que la gran red de Metro de la Región Metropolitana dejó de funcionar. La inédita emergencia también provocó una gran congestión vehicular pues los semáforos se apagaron, aunque el aeropuerto de Santiago, los centros de salud y las cárceles del país operaron con normalidad.

Con el toque de queda unos 3 MIL militares se desplegaron durante la noche del martes y la madrugada del miércoles para mantener el orden y la seguridad, según informó la subsecretaría de Defensa. Por las calles vacías, el ambiente despertó los fantasmas que vivió Chile durante la pandemia.

El apagón ha ocurrido en el fin del verano chileno, que suele cerrarse con el gran evento del Festival de Viña del Mar. El corte de luz fue tan extenso que, cuando en algunos sectores de la capital regresó el suministro, se escucharon gritos de los vecinos como si celebraran un gol.